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Vivimos en una era donde la tecnología ha calado en todos los aspectos de nuestras vidas. Sin embargo, esta omnipresencia digital ha traído diversos desafíos, especialmente para nuestros niños y adolescentes, como por ejemplo el de las adicciones digitales. Estos trastornos se han convertido en una problemática real y preocupante que, como sociedad y como padres, debemos afrontar. Lo que antes solía afectar principalmente a adolescentes, ahora aparece incluso en menores de ocho años.

En este blog, abordamos este tema con la ayuda de Paqui Marañón, una de las orientadoras del Colegio Pedro Poveda de Jaén, quien nos informa sobre programas desarrollados en su centro, dirigidos a adolescentes y sus familias:  

La escuela ha implementado programas en colaboración con la policía, respaldados por la Junta de Andalucía, donde se imparten charlas tanto a estudiantes como a padres. El tema de las adicciones digitales y los riesgos asociados a internet es de los más solicitados. Desde el primer año de la educación secundaria, se indaga sobre el tiempo que los niños pasan frente a pantallas, y los resultados son alarmantes: algunos llegan a las 7 horas diarias en redes sociales y juegos en línea. 

El uso excesivo de tecnología ha normalizado su presencia en la vida cotidiana desde que los niños son muy pequeños. Sin embargo, ellos no comprenden la gravedad de este enganche hasta una edad más avanzada, a menudo demasiado tarde. “La tecnología se ha convertido en una recompensa o una forma de mantener a los pequeños tranquilos”, afirma Paqui, lo cual ha llevado a problemas de convivencia y a la falta de desarrollo de habilidades sociales.

Un aspecto crucial que Paqui destaca es el papel de los adultos como modelos a seguir. Los niños imitan lo que ven en sus padres y madres, y si nos ven inmersos en nuestras pantallas, seguirán nuestro ejemplo. La lectura y otras actividades creativas se ven amenazadas por el tiempo dedicado a los dispositivos digitales. “Por esta razón, es necesario establecer horarios moderados de uso de tecnología para permitir que los niños descubran otros talentos y habilidades” nos explica Paqui. 

Por último, decir que abordar este tipo de adicciones requiere un enfoque equilibrado. La concienciación, la educación y el modelado de comportamientos son fundamentales para adentrarse en el mundo digital. Como padres y como sociedad, debemos trabajar juntos para proteger a nuestros hijos y fomentar un equilibrio entre la tecnología y las experiencias del mundo real. Al hacerlo, podemos ayudar a nuestros hijos e hijas a crecer de manera saludable en la era actual.